jueves, 20 de noviembre de 2008

TU ME EXPLICAS Y LUEGO YO TE EXPLICO

Cada vez que hacían el amor, el marido insistía en que fuera a oscuras, 100% oscuro, cerraban ventanas, apagaban luces…

Después de 20 años, a la mujer se le hacía cada vez más ridículo, así que preparó un plan para quitarle esa manía al marido.

Una noche, durante una sesión salvaje, en medio de gritos y romanticismo carnal ella encendió las luces repentinamente.

Cuál sería su sorpresa al mirar hacia abajo y ver que su marido tenía un consolador más grande que un pene de verdad, y como si eso fuera poco, el propio lo tenía completamente caído.

Se volvió loca, se puso histérica, los que habían sido gritos de placer se convirtieron en insultos.

¡¡Hijo de puta, cabrón!! ¡¡IMPOTENTE!! -Le gritó.

¿Cómo pudiste estar engañándome todos estos años?

¡Desgraciado!, ¡Más te vale que vayas dando una buena explicación!

El esposo sin inmutarse, con mucha calma, la mira fijamente a los ojos y le responde:

Yo te explico lo del juguete... y tú me explicas lo de los niños…

-0-

Así debieron haber sido los cuentos de hadas que nos leían cuando éramos niños:


Había una vez en tierras muy lejanas, una princesa hermosa, independiente, y segura de sí misma que se encontró a un sapo mientras pensaba en asuntos ecológicos y en sus acciones en la bolsa de valores a la orilla de un estanque impoluto, en una verde pradera cerca de su castillo. El sapo saltó al regazo de la princesa y le dijo: ' Elegante Dama, Yo fui una vez un hermoso príncipe, hasta que una malvada bruja me hechizó. Un sólo beso tuyo podría revertir el hechizo y convertirme de nuevo en el maravilloso y joven príncipe que soy y entonces, preciosa, podremos casarnos y podrás cuidar de mi castillo con mi madre, donde podrás preparar mis alimentos, lavar mi ropa, dar a luz a mis hijos, y estar por siempre agradecida y feliz de poder hacerlo . Esa noche, mientras la princesa disfrutaba de una elegante y deliciosa cena de ancas de rana ligeramente salteadas sazonadas con vino tinto y salsa cremosa de cebolla, se sonrió mientras pensaba:

¡Ni madres, güey!



7 comentarios:

Unknown dijo...

jojojojo pobre wey, impotente y cornudo jajajaja

PashmiNa dijo...

jajajajajajajajajajajajajajajajase lo cacharon en la movida!!! jajajajajajajajaa!!!!

Muuy buenooooo

saludos!

pekeña dijo...

jajajajaja, muy bueno el de los esposos jaja

saluditos!!!

Unknown dijo...

XD XD me gustó mas el segundo!!!! afortunadamente esos "principes" se estan extinguiendo°°°

saludos!!!


(por fa pasa por mi blog, siii lo se, pero que tanto es tantito =P)

mayita dijo...

ajajajajajajjaajajajaja...
excelents los dos!!!!

seguro yo hubiera dicho lo mismo
ke la princesa: "ni madres"

ajajaj..
saludos!!
:D

Unknown dijo...

jaja buenisimos!

P´PITO dijo...

JAJAJAJAJAJAJAJ dicen que los chistes se crean de algo real ...me imagino el matrimonio ese jajajajajaj