- ¿Qué se te ofrece?
A lo que de inmediato contesta el indio:
- ¡indio querer mujer!
La "manager" de las "nenotas" le contesta:
- ¿Tienes experiencia?
- Pues no...
- Pues vete allá a la sierra donde vives, búscate un tronco de árbol que
tenga un agujero... practicas allí durante un mes... y luego vuelves, ¿de
acuerdo?
El indio se va.
Practica durante todo un mes con un tronco, regresa al burdel, pero trae consigo una tabla muy gruesa debajo del brazo.
Toca a la puerta y nuevamente le abre la "manager".
- Indio querer mujer, ¡indio ya tener experiencia!
La mujer le hace entrar y llama a Romualda para que le atienda.
Romualda y el indio suben al cuarto, ella se pone su negligé y se hinca en la cama para acostarse... cuando de repente el indio le da tremendo tablazo en las nalgas.
Romualda muy enojada y sobándose su trasero le dice al indio:
- Pero, ¿qué te pasa?, ¡indio pendejo!, mira nomás, ¡hasta al suelo me tiraste!. ¿Por qué me pegas con la tabla?
El indio muy serio, parado a la orilla de la cama, le contesta:
- indio querer asegurarse de que tu no tener avispas en el agujero.